jueves, 20 de marzo de 2008

DIVAGACIONES

Quiero un disruptor intestinal, que demonios. Se que no existe pero por por los genitales purulentos de un ocelote que alguien debería inventarlo. En serio, la idea de un cacharro que pueda hacer que te cagues encima literalmente siempre me ha parecido de lo mas atractiva, que todos tenemos mucha mierda dentro, y a veces es bueno soltarla. Ademas, las posibilidades son infinitas, ¿alguien se imagina lo que se podría hacer con un pequeño grupo de gente dispuesta a divertirse durante la Nochevieja en la Puerta del Sol? Sería un fin de año realmente memorable.

Estoy dejando de escribir, poco a poco, lentamente. No es por falta de ideas, mi cerebro sigue a su puñetero ritmo, ignorante de todo lo que le atañe, y me saca proyectos nuevos cada 20 segundos. La mayoria son morralla, como mi inacabado y desechado primer relato largo, pero alguna de las ideas tiene posibilidades. El problema es que no consigo reunir la fuerza de voluntad suficiente para ponerme a desarrollarlas, total no las va a leer ni perry, asi que ¿para que el esfuerzo? Y quiza, solo quiza es una forma de autoconvencerme de lo que puede estar por llegar. Y es que eso me da miedo, la posibilidad, remota, si, muy remota, lo se, de que por algun motivo y a raiz de todo, pueda empezar a perder cosas: la capacidad de escribir, de hablar, de recordar cosas...eso me aterra, el ir perdiendo poco a poco dias de tu vida, la gente que quieres, tu propio yo (que podra ser mejor o, como en mi caso, un puñetero desastre, pero que leches llevas toda tu vida construyendolo como para que te lo quiten), en definitiva, todo lo que me hace ser el que soy, para, al final estar completamente perdido y solo, y lo que es aun peor, no tener siquiera conciencia de ello.

2 comentarios:

El ente de metro y medio dijo...

No tengas tanto miedo muchacho, es preferible q hagas lo q sientas q necesitas hacer y, si llega el dia q pierdas las capacidads, hayas hecho al menos uso de ellas...

darkestfears dijo...

Había una vez una chica que se ahogó en un pozo de tanto pensar en lo que había por llegar y sentir que no era nada bueno. El futuro, puto futuro, aunque fuese el más inmediato. ¿Sabes qué pasó? Al final estar en el pozo del futuro tantísimo tiempo le impidió vivir el presente. Escapa de esto en la medida que puedas (experience says). Huye insensato!

Dicen por ahí que el único momento en el que merece la pena ser valiente es justo cuando se tiene miedo (ya sé que esto es muy fácil decirlo pero no hacerlo...) Pero no dejes de escribir, que ya sabes que tienes muy buenas ideas y yo no conozco al perry ese del que hablas pero también tienes fans ;)