lunes, 24 de marzo de 2008

AUTORES MALDITOS (I)



La verdad es que resulta increible el número de buenos, buenisimos escritores que viven en el más perenne de los olvidos, simplemente por no se conocidos por cierta gente, o no ser parte de lo que daremos por llamar una cultura "pop".

Si alguien dice el nombre de H.P. Lovecraft, quien más quien menos lo conoce, aunque sea de oidas porque tiene un amigo que conoce a un tipo qu le gusta jugar al rol, o el cine de terror o, esos son los más raros, incluso tiene un amigo que le gusta leer y, aunque el de Lovecraft no ha leido nada, el nombre como que le suena. Ya si nos movemos en ciertos circulos (tiendas de comics, cineforums de terror, ludotecas varias, etc) la sola mención del nombre del Genio de Providence hace que hordas de subhumanos con problemas de acne comiencen a convulsionarse de gozo y placer pensando en los horrores tentaculares escritos por maese Lovecraft.

Similares efectos, aunque a menor escala todo hay que decirlo, obtendremos si mencionamos el nombre de Poe, de Goethe o, incluso, de Bram Stoker. Todos grandes escritores, todos recordados por el gran público. Pero hay muchos que no lo han hecho, son autores enterrados, olvidados, malditos. Nadie los recuerda y por tanto nadie los conoce. Enterrados.

¿Quien conoce la obra de Lord Dunsany, gran influyente en la primera etapa de cuentos del joven Lovecraft y motor de su extensa y excelente etapa "onirica"? ¿Quien ha oido hablar de Clarck Asthon Smith y sus horrores imposibles y su extraña afición a tallar pequeñas cabezas de demonio que tiraba en cualquier parte y que posiblemente serían encontradas, años más tarde, por asombrados viajeros? ¿Quien conoce a Arthur Machen y su viejo y olvidado Dios Pan, con su afiliacion a la Golden Dawn britanica? ¿Quien conoce a William Hope Hodgson?

William Hope Hodgson nace en 1875 en Lancanshire, Inglaterra, hijo de un clérigo del condado de Essex. Como tantos y tantos escritores (y gente corriente y moliente) de su época, nuestro hombre se hizo marinero, estando ocho años recorriendo el amplio y ancho mar con la marina mercante británica. Después de dar tres vueltas al mundo (ahi es nada) decidió que su heroismo estaba más que probado y que mejor se buscaba alguna cosita mas tranquila y relajada en tierra firme.

Comenzó a publicar tarde, muy tarde, y por la última novela que escribió, un relato inspirado en sus travesias por alta mar acerca de unos marineros varados en el Mar de los Sargazos. "Los Botes del `Glenn Garry´" se publicó en 1907. En 1908 se publica la que para mi es su obra maestra, "La Casa en el Confin del Mundo", "La Casa en el Confin de la Tierra" o "La Casa en el Borde" (eso va segun edicion, pero vamos, el titulo original es "The House on the Borderland", asi que elegid el que más os guste). En 1909 publica "Los Piratas Fantasma" y en 1912, la que será su novela más extensa, y la única que se adentra descaradamente en el terreno de la ciencia-ficcion, "El Reino de la Noche"

En "La Casa en el Confin de la Tierra", William Hope Hogdson nos entrega un maravillo cuento de horror cósmico, en el que un hombre junto con su hermana y su perro se mudan a una casa perdida en la campiña inglesa. Pronto son asaltados por unas horribles criaturas mitad hombre, mitad cerdos, además de sufrir visiones de una intensidad realmente cósmica. Es facil recoconer las influencias que tomó Lovecraft de este relato:el horror cósmico, el dios ancestral y estelar que corrompe todo lo que toca, los seres degenerados debido a un contacto incestuoso y con criaturas de otros planos, etc, etc; y el mismo Lovecraft reconoce su deuda comentando a Hodgson en su ensayo "El Horror en la Literatura". También, y con un poco de imaginación, podemos encontrar ecos de esta novelita (sobre todo en la parte final) en un gran clásico de la ciencia-ficcion, como es "2001: Odisea en el Espacio" de Arthur C.Clarke (en paz descanse).

En definitiva, mangurrianes, que si os gusta el terror cósmico de Lovecraft, nunca es tarde para echarle un ojillo a la obra de uno de los autores que fueron inspiración suya.










1 comentario:

Adrián dijo...

Me has intrigado, y como ya hice con Machen (Que grande fue leerlo por primera vez, por los dioses) voy a darle una oportunidad.